DSOGaming publicó una prueba de rendimiento de God of War en PC, y ahora la ha ampliado con un análisis más completo donde mide, incluso, el escalado a nivel de CPU del juego, y su rendimiento con diferentes tarjetas gráficas.
God of War es más exigente de lo que parece. Con una RX 580, no es posible mantener 30 FPS estables en 1080p y calidad ultra. Si tenemos una GTX 980 Ti, podemos jugarlo en esa configuración con medias de 42 FPS y mínimos de 33 FPS. La Radeon RX Vega 64 logra un resultado mejor, con medias de 58 FPS, pero los mínimos son de 42 FPS. Solo a partir de una RTX 2080 Ti tenemos medias de 89 FS y mínimos de 70 FPS.
En rendimiento CPU, God of War no funciona con procesadores de 2 núcleos y 2 hilos, pero sí que arranca si tenemos 2 núcleos y 4 hilos, aunque el rendimiento no es óptimo. A partir de 4 núcleos y 4 hilos podemos conseguir un buen rendimiento, y el nivel óptimo se alcanza a partir de 4 núcleos y 8 hilos. Si pasamos de ahí, más núcleos e hilos apenas mejoran levemente el rendimiento.
Se nota que es un port de consola con una optimización no muy cuidada, no solo porque es muy exigente incluso con la configuración original de PS4 en 1080p, sino porque utiliza la API DirectX 11, y esto hace que las tarjetas gráficas Radeon de AMD rindan peor que las de NVIDIA. El pico mínimo de la Radeon RX 6900 XT lo confirma, y según DSOGaming se produce cuando cambiamos la vista y miramos hacia la cabaña hogar de Kratos.
Gracias al DLSS, y al FSR, es posible jugar en resoluciones altas con tarjetas gráficas menos potentes, aunque ambos reescalados ofrecen resultados muy distintos.

